Walter Malca Rodas; C.Ss.R:
Para ser felices y encontrar paz en el corazón necesitamos comprender, confiar y estar plenamente convencidos que todo lo que nos pasa en la vida sucede por algo (Rom. 8,28). Tener clara esta idea es importante para no desesperarnos antes lo problemas y adversidades y estar atentos para acoger las bendiciones. Existen numerosas historias de personas cuyas experiencias dolorosas, e incluso sus pecados, sirvieron para que se manifieste el poder y la gracia de Dios, una de ellas es la historia, tan conocida, de José vendido por sus hermanos (Gen. 37-50).
José, como sabemos, era un jovencito a quien sus hermanos le tenían envidia. Cierto día, estando lejos de casa, sus hermanos deciden matarlo, pero al final se arrepienten y deciden venderlo a unos mercaderes, quienes lo llevan a Egipto y ahí lo venden a un Putifar, ministro y alto funcionario del Faraón. La mujer de este hombre se enamora del muchacho y le propone acostarse con ella, pero él fiel a sus principios no cede a la tentación, por ello la mujer lo acusa ante su marido, quien lo manda meter a la cárcel.
Estando en prisión adivina los sueños de dos empleados del rey, que estaban en ese lugar: al jefe de los panaderos le dice que en tres días lo van asesinar y al jefe de los coperos lo restituirán en su puesto. Los sueños se hacen realidad. Pasado un tiempo el Faraón tiene los famosos sueños de las vacas gordas y las vacas flacas, y de las espigas gordas y espigas flacas, ningún adivino puede interpretar sus sueños y es ahí donde el jefe de los coperos se acuerda y le comunica al rey que en la cárcel hay un hombre que interpreta sueños. El rey lo manda llamar y José interpreta los sueños diciendo que ellos revelan siete años de abundancia, seguidos de siete años de carencia y le recomienda al rey que nombre un administrador sabio para que guarde el trigo en graneros en los tiempos de abundancia. El rey lo nombra en su primer ministro. Llegado el tiempo de la sequía el hambre arreciaba por aquel lugar, los hermanos de José acuden a Egipto para comprar trigo, al inicio no lo reconocen, pero al final José se da a conocer a sus hermanos y los lleva a vivir a Egipto, junto con toda su familia.
Muchas veces me he puesto a pensar cómo hubiese sido la situación de aquella gente si José no hubiese sido vendido, de seguro que el pueblo de Egipto y sus alrededores moría de hambre. Con esto no estoy diciendo que Dios apruebe los actos malvados, lo quiero decir es que Dios es el único que puede convertir el mal en bien; es decir aprovechar las historias trágicas para darles un final feliz, que sirva a la humanidad. Por este motivo, amable lector, cuando estés en alguna situación complicada cree y confía que Dios puede sacar del mal bien y del dolor alegría.
El final de la historia de José es muy iluminador. Cuando muere Jacob, su padre, sus hermanos tienen miedo. José les da confianza diciéndoles: “No tengan miedo, ustedes quisieron hacerme mal, pero Dios quiso dar vida a todo un pueblo con mi sufrimiento” (Gn. 50,20). ¿Ves? Tu dolor, tu sufrimiento puede ser fecundo, si te pones en las manos de Dios.
“UNIR PUNTOS”
Jobs Steve, indiscutiblemente una de las personalidades más interesantes de nuestro tiempo, hablaba de la idea de “unir puntos”. Él creía que todos los acontecimientos de la vida están unidos de un modo misterioso, de tal modo que algunas experiencias difíciles, a la larga, terminan siendo beneficiosas para nuestra vida. Esta idea la decía desde su propia experiencia.
Él siendo fruto de un embarazo no deseado, fue criado por unos padres adoptivos, que no tenían muchos recursos. Al terminar la secundaria ingresó a una de las universidades más caras de los Estados Unidos, donde gastó todos los ahorros de sus padres solamente en el ingreso, luego ya no tuvo como solventarse. En el único semestre de la universidad se inscribió en un curso de caligrafía solamente porque le pareció interesante, sin saber que diez años después le serviría para programar las fuentes de sus computadoras.
Cuando su empresa Apple había crecido se asoció con una persona indeseada, que terminó expulsandolo de su propia empresa. Esto le dolió mucho a Jobs, pero no se amilanó, sino que creó dos empresas: Pixar, dedicada a la creación de dibujos animados, y NeXT, una empresa dedicada a crear tecnología informáticas. En un notable giro de los acontecimientos, Apple compró a NeXT, y así él retornó a su empresa original y la tecnología que desarrollaban en NeXT se convirtió en la fuerza impulsora del renacimiento de Apple.
Inspirado en la experiencia de Jobs, cuando usted se encuentre en alguna situación difícil, piense que esa experiencia más tarde dará sus frutos.
SEÑOR, AUMÉNTAME LA FE
Señor, auméntame la fe: Auméntame la fe para creer y entender que pase lo que pase tú siempre estás conmigo, que jamás me abandonas y siempre estás a mi lado. Auméntame la fe para creer que tú jamás me dejarás caer de tus benditas manos y si alguna vez caigo tú extenderás tu mano grande y poderosa para rescatarme. Ayúdame creer que mi vida tiene un propósito y que las situaciones más adversas, por las que me toque atravesar tienen un sentido, una finalidad, una orientación dentro de tu plan de salvación que tienes conmigo y con la humanidad entera. Jamás me dejes caer en el abismo de la desesperación, al contrario, lléname de paz, fortaleza y esperanza. Amén
Padre Nuestro…, Ave María…, Gloria.