JESÚS ESTÁ VIVO

Jesús está vivo y sigue actuando. Esta es la gran convicción que debemos tener los cristianos de la actualidad, porque es una gran verdad. El Señor actúa siempre de muchas formas. A veces, incluso, de un modo grandioso e inesperado, con gente que ni siquiera tiene la menor predisposición. Consideremos los siguientes casos:

Tengo una amiga que la conozco desde que yo era adolescente. Después de mucho tiempo me puse en contacto con ella y en la conversación que tuvimos me contó la siguiente historia:

“Walter, tú sabes que mi familia es de tendencia atea. Yo misma dudaba de existencia de Dios. En una ocasión estaba muy mal. No tenía esperanza. Estaba postrada en cama. Ni siquiera podía caminar. Mis familiares tenían que trasladarme de un lugar para otro. Literalmente estaba paralítica.

Una noche soñé con mi papá, que como sabes está muerto. Él me decía que me estoy envenenando con tanta medicina. En un determinado momento visualicé a Jesús que sacaba agua de un pozo y me lo ofrecía. Yo me resistía. En eso mi padre me dice: “Bebe del agua que te da Jesús”. Yo bebo de esa agua y sentí una frescura y alivio. Al despertar estaba sana completamente. ¿Cómo dudar, amigo, de la existencia y el poder de mi Señor?

Una niña de cinco años tuvo una experiencia similar. Ella sufría de asma. Cierto día su madre se da cuenta que desde hacía unos días la niña ya no tenía los síntomas. Entonces le dice: “Hija, desde hace varios días veo que ya no tienes asma”. “No, mamita, -le responde la niña- lo que pasa es que en una noche soñé con Jesús que tocaba mi pechito y me ha dicho que no voy a tener esa enfermedad, porque él me ha sanado”.

Estas anécdotas y muchas otras que conozco son la evidencia clara de que Jesús de verdad está vivo y sigue actuando. Confiemos plenamente en el Señor.

Señor, aumenta fe mi para convencerme que tú estás aquí conmigo y me acompañas siempre. Ayúdame a descubrir los signos de tu presencia amorosa y misericordiosa, que siempre me acompaña en cada momento de mi vida. Cicatriza mis heridas, cúrame de mis enfermedades, calma mis ansiedades y dame la paz que tanto necesito. Amén.